Vida Por Su Muerte

Como líder espiritual y moral de mi hogar tengo el privilegio de llevar a mi familia a los pies de Dios. Aunque no lo hago perfectamente, estoy seguro que hay otros que lo podrían hacer mejor que yo, pero lo bueno es que Dios siempre bendice a aquel que le obedece. Mi familia y yo hemos estado estudiando el libro a los Romanos por un mes. Gracias a Dios por los maestros que nos llevan a la profundidad de las escrituras. John Piper es uno de los maestros que nos ha bendecido mediante sus enseñas.

En Romanos Capítulo 9 encontramos una defensa a favor de la elección. La elección es el decreto soberano de Dios en que, por su propia voluntad y nada más, escoge a gente a dar su gracia y a otros les deja en su pecado. El decreto de elegir a algunos y pasar por alto a otras personas no tiene nada que ver con la persona. La elección es un misterio en que el ser humano no tiene derecho de cuestionar a Dios, "¿Dónde estabas tú cuando yo echaba los cimientos de la tierramelo, si tienes inteligencia." (Job 38:3-5). La elección de Jacob en vez de elegir a Esaú no se base en su genealogía puesto que los dos nacieron del mismo papá y mamá, ni en sus obras, porque Dios decretó antes de su nacimiento que el mayor serviría al menor (Gén 5:23).

La doctrina de elección les hace a muchos sentirse muy incómodo. Desde su perspectiva, Dios es tan amoroso que jamás enviaría a alguien al infierno. El problema con esa lógica defectuosa es que nadie es capaz de elegir a Dios y no hay nadie quien por su propia voluntad que se somete a Dios. Ellos están en el infierno porque no eligieron a Dios. El hombre sigue en su rebeldía y pecado hasta que Dios le de fe para creer, la cual es regalo de Dios (Efesios 2:8-9).

Con respecto a Jacob y Esau, el asunto es muy claro. Dios dice, "a Jacob amé, pero a Esau aborrecí" Rom 9:3). No es que Dios no amó tanto a Esaú como amó a Jacob. No, la escritura no dice eso. Dice "a Esaú aborrecí" así que Dios lo dejó a Esaú en su condición espiritual corrupta en vez de salvarlo por Su gracia. "¿Qué diremos entonces? ¿Que hay injusticia en Dios? ¡De ningún modo!"(Romanos 9:14). Dios lo hizo para que su propósito conforme a su elección permaneciera (Romanos 9:11b).

El libro que el teólogo puritano John Owen lanzó hace 4 siglos atrás es uno de las mejores defensas a favor de la elección. En realidad es una polémica en contra de la expiación universal. Si estás luchando con la doctrina de gracia, vale la pena leer el libro de John Owen titulado  Vida Por Su Muerte o escucharlo abajo.


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